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SIPOLNA al servicio de sus afiliados, en cada rincón del país.
¡Somos tu sindicato!.

Sobre Nosotros

Sindicato Policial Nacional:
No buscamos otra cosa que mejorar la calidad de vida y las condiciones de trabajo de todos los Funcionarios policiales. Somos la herramienta de trabajo para lograr ese fin en común. Para ello la suma de todas las voluntades es imprescindible.

La Fuerza que un sindicato tiene está en la cantidad de afiliados que posee, ese poder de resolución cae pura y exclusivamente en cada uno de nosotros, en nuestra conciencia, en nuestra voluntad y poder de decisión, de decidir qué mecanismos utilizar para reclamar en forma efectiva todo aquello que por derecho le pertenece a cada trabajador.
No es tarea fácil:
Durante más de 180 años el policía ha sido postergado en la sociedad, en el salario, en las condiciones de trabajo, en la seguridad y estabilidad laboral, en el derecho a una vida digna, al goce pleno de la libertad y en el reconocimiento por parte del estado como un trabajador. Durante todo este tiempo de existencia que tiene nuestro sindicato y los sindicatos en general, 180 años de problemática, irregularidades, atropellos, injusticias e ignorancia han golpeado nuestras puertas. Y a medida que la voz de quien pedía (equidad, igualdad de derechos, justicia social y mejores condiciones), se hacía oír, tomábamos nota de cada reclamo, cada inquietud, cada planteamiento, hasta superar nuestra capacidad de respuesta.

En ese desglose de las situaciones, hemos ido llevando a nuestra mesa de trabajo, los temas más importantes que afectan al mayor número de policías, sin olvidar el resto. Somos compañeros que enfrentamos en el día a día la lucha de todos como si fuese la propia. En realidad es así, porque sin importar jerarquía, antigüedad o destino, hay una palabra sobre el pecho que nos une. Somos Policías.

Y por aquellos que ya no están, los que luchamos no olvidamos tanto sacrificio, tantos sin sabores, tantas penas, tanta marginalidad que el pasado nos dejó. Pero debemos tener la voluntad inquebrantable, la fuerza inagotable para luchar sin cesar, aún a sabiendas que no lograremos todo lo que deseamos, por nosotros, y por los que vendrán.